Nueve centros del Colectivo de Escuelas Rurales de Lanzarote estrenan sus nuevos comedores escolares
El proyecto de conciliación familiar y sostenibilidad se ha materializado gracias a la colaboración entre el Gobierno de Canarias, el Cabildo, los ayuntamientos y las comunidades educativas
Un total de nueve de los 13 centros que forman parte del Colectivo de Escuelas Rurales de Lanzarote (CER) han estrenado en este curso 2024-25 sus nuevas instalaciones de comedor.
Esta iniciativa busca fomentar la conciliación familiar y promover la sostenibilidad, y ha sido posible gracias al trabajo conjunto entre la Dirección General de Centros de la Consejería de Educación del Gobierno de Canarias, la Unidad de Coordinación y Planificación de Proyectos del Cabildo de Lanzarote, la Reserva de la Biosfera, la comunidad educativa del CER y los ayuntamientos.
Además, la empresa Tágora participó inicialmente en la mediación y la involucración de las comunidades educativas y las familias dentro del proyecto "Colegios de la Biosfera".
Gracias a la gestión de fondos europeos, a través de los fondos FEDER Conurban Azul, las escuelas han habilitado espacios destinados a los comedores escolares, equipados con mobiliario, electrodomésticos y menaje adecuado para el servicio. Cada día, un total de 148 comensales podrán disfrutar de sus almuerzos elaborados en las cocinas del CEIP La Destila de Arrecife.
Las escuelas unitarias que ya ofrecen este servicio son La Vegueta, Los Valles, Soo, Tao, María Auxiliadora, Muñique, Güime, Caleta de Famara y El Cuchillo. Además, en el marco de este proyecto, el CEIP Capellanía, pionero en la creación de un ecocomedor, ha ampliado sus espacios destinados a este fin debido al aumento de la demanda por parte de las familias cada nuevo curso.
La Reserva de la Biosfera, como promotora del proyecto Colegios de la Biosfera, ha ofrecido un acompañamiento continuo a las comunidades en el proceso de creación y promoción de los comedores escolares.
En este sentido, el consejero responsable, Samuel Martín, subraya que “no solo se trata de dar apoyo a los hogares sino también de la transmisión complementaria de valores de sostenibilidad, como el aprecio por la producción local, el conocimiento de las prácticas agrícolas tradicionales o la importancia de una alimentación saludable”.
El objetivo de las administraciones y de las comunidades educativas es extender este servicio a todas las escuelas unitarias de la isla y avanzar hacia su conversión en ecocomedores, fomentando así una mayor integración de la sostenibilidad y la educación ambiental en la vida escolar.